La Atalaya de las Nieves está ubicada a las afueras de la ciudad de Toledo, capital provincial de la Comunidad de Castilla-La Mancha. Está situada sobre la cresta más elevada de la zona, poblada con encinares.
Atalaya significa en árabe «tala´la» o al-manara» (un lugar con
luz). En 1576 se la conocía como Torre de la Talaya, una
construcción árabe cuya función era la de vigilar los campos de
Calatrava, comunicandose ópticamente con el cerro de Villaluenga o
del Aguila, en el que existió una fortaleza.
De
4,55 metros de anchura y una altura de 10 metros, hasta hace unos
años se encontraba en ruinas, con un importante hueco en la fachada,
y parte de la azotea desplomada, siendo restaurada, con muy mal
criterio, ya que el acceso original ha desaparecido, construyéndose
un acceso al ras del suelo y un escalera de caracol en su interior,
una pena.
La
zona donde se encuentra ubicada la torre se fortificó fuertemente
durante la guerra civil, estado situada en el Frente Sur del Tajo el
1 de marzo de 1938, cuando las tropas nacionales realizaban una
operación sobre la atalaya de las Nieves. El ataque fue llevado a
cabo por la I Brigada de la 107ª División, al mando del teniente
coronel Luis Izquierdo Carvajal.
Confiados
en el factor sorpresa, este nuevo ataque, breve e intenso, supuso el
único fracaso nacional en la zona al ser repelido por los defensores
republicanos atrincherados en la atalaya, quienes pusieron en fuga a
las fuerzas atacantes que dejaron por el camino cerca de un centenar
de bajas con todas sus armas y bagaje.
Todos
los cerros cercanos se encuentran llenos de trincheras, encontrando
en los alrededores gran cantidad de metralla y agujeros de impacto.
Fuente: Castillos del Olvido
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