jueves, 14 de marzo de 2024

Torre de Portixol (Jávea, Alicante)

 


La Torre de Portixol, también llamada Torre de Cap Prim, se encuentra situada en el término municipal de la localidad de Jávea en la comarca de la Marina Alta de la provincia de Alicante (Comunidad Valenciana). 

Situada sobre la parte más elevada del Cabo de San Martín o Cap Prim, en el término municipal de Xàbia, y a unos 300 metros sobre el nivel del mar, se encuentra esta torre almenara de planta circular y morfología cilíndrica, con una base alamborada. La altura conservada de la torre puede situarse en los 7 metros y está levantada a partir de mampostería irregular de origen local dispuesta en hiladas horizontales y recogida en mortero de cal y grava de tonalidad blanquecina, a excepción del acceso y los restos de cuatro ladroneras dispuestas en los puntos cardinales. 

La construcción se encuentra enfoscada con una capa de enlucido de tonalidad grisácea que en la actualidad ha sido sustituida por cemento con el fin de convertirla en una residencia particular, lo cual ya es demasiado frecuente en esta zona turística como ocurre en otras torres, pues la presión urbanística ha podido más que seguir manteniendo nuestro escaso patrimonio, lo que hace que al ser de titularidad privada, el acceso a ella no está permitido. El vano de acceso a la torre se sitúa en altura a algo más de 3 metros, y se accedería mediante una escalera de cuerda, mostrando en la actualidad un patín escalonado de mampostería que permite acceder al vano de entrada que es de gran tamaño y construido en ladrillo revocado. 

La torre consta de dos cuerpos de habitación de planta circular y un remate con plataforma donde se dispondría la batería. El primero sería la habitación a la que se accede, presentando además un vano de luz. Desde esta planta se accede a la batería a través de una escalera de mampostería. La torre no presenta vanos originales, y todos los que son visibles desde el exterior son ventanas de gran tamaño, integradas en la reforma de la torre para uso particular. 

Las referencias documentales de la Torre de Portixol nos indican que se levantamiento se produce dentro del plan defensivo dictado por el Duque de Maqueda en el año 1.553, ya que unos años más tarde, en 1.561, el ingeniero italiano Antonelli il Vecchio recomendaba la realización de reformas en la torre, indicando que “...la torre del cabo primo que sigue despues sele hara su guirnalda y un morterete para tirar a cabo primo dela ysla y hasta cabo negrete a la cueba del agua y hechar los enemigos que tan de ordinario cunden...” (Menéndez Fueyo 2014). Posteriormente, el informe de Juan de Acuña del año 1.585 señala que esta torre defiende un punto geográfico “...de lo mas peligroso de toda la costa de dicho Reyno de Valencia asi por hallar abrigo para los corsarios para sus galeotas...”, confirmando la planta circular de ella y señalando que “...tiene algun escarpe, al pie tiene unas garitas algo bastas y tiene un parapeto, conviene poner las garitas mas altas y adereçar el parapeto...” (Banyuls i Pérez 1996). 

Como último memorial del Resgardo, hay que destacar el informe del año 1.788, realizado por Cristóbal de Rojas, donde se precisa que la construcción necesita “...recorrer el hormigon del algibe para precaber que filtre el agua lo que podra tener un coste de 500 reales. Tambien es indispensable construir un garitón para el centinela o atalaya...” (Campón y Pastor, 1988). Finalmente, ya entrados en el siglo XIX y con el fin de las incursiones corsarias, por la Real Orden del Cuerpo de Carabineros del 1 de octubre de 1.849, a instancias del capitán teniente de este Cuerpo Don Joaquín Aguado , se procede a la compra de la torre y las 58 tahullas de su redonda por la suma de 116 escudos (Menéndez Fueyo, 2014). 

Fuentes: Guía de los Castillos, Torres y Fortificaciones de Alicante
                Guardianes de Piedra (MARQ)
                Wikipedia

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viernes, 23 de febrero de 2024

Torreta dels Moros (Vinaròs, Castellón)

 


La Torreta dels Moros se encuentra situada en el Puig de la Misericordia, montículo del término municipal de la localidad de Vinaròs de la comarca de El Baix Maestrat de la provincia de Castellón (Comunidad Valenciana). 

El cerro estuvo ocupado por un poblamiento ibérico. Posteriormente los musulmanes fundaron en el lugar un poblado en el que levantaron la torre que ha llegado hasta nuestros días. La torre está datada entre los siglos XI al XVI. 

Esta torre debió formar parte del sistema de vigilancia costero, ya que se encuentra en un enclave de excelente visibilidad. A raíz de los restos cerámicos encontrados en sus inmediaciones se data en época musulmana. En el entorno se han excavado también un yacimiento del Hierro Antiguo y de época ibérica (Puig de la Misericòrdia, ss. VII-II a.C.), una villa romana detectada en prospección (La Closa, ss. I-V d.C.), así como la ermita local de Nuestra Señora de la Misericordia (ss. XIV-XX d. C.). El yacimiento islámico y los restos de la Torreta dels Moros nunca han sido objeto de excavaciones arqueológicas ni de actuaciones de conservación. 

La torreta se encuentra en la ladera sureste del cerro. Se trata de una torre exenta construida con mampostería irregular de piedra local y con sillería en las esquinas. Conserva una planta cuadrangular de unos 6 m. de lado con parte de la cimentación. En la parte inferior hay restos de un aljibe abovedado subterráneo y una porción del lienzo de su esquina norte que mantiene su alzado completo, con una altura de unos 10 m. Se observan indicios de tres plantas, la última con aspilleras y una cubierta plana rematada con almenas. 

Se encuentra en estado de ruina progresiva y acaba de entrar en la Lista Roja de Patrimonio. 

Fuentes: Hispania Nostra
               Ayto. de Vinaròs 
               Wikipedia

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sábado, 17 de febrero de 2024

Castillo de la Peña Foradá (Vall de Gallinera, Alicante)

 


Los restos del Castillo de la Peña Foradá se encuentran situados en la localidad de la Vall de Gallinera en la provincia de Alicante (Comunidad Valenciana).

La zona de los pies de la Vall de Alcalá se sitúa en la zona alta y media de la Vall de Gallinera, sirviendo de separación entre ambos valles toda una línea de montañas que presentan su pendiente suave hacia Alcalá y la abrupta y agreste hacia Gallinera. Siguiendo la línea de escarpes nos encontramos en un punto en el que el escarpe gira a la derecha, cerrando el Valle de Alcalá y abriéndose más ancho el de Gallinera. Justamente en este punto se levanta un altozano culminado por una peña agujereada por la erosión llamada la Peña Foradá, de donde toman nombre los restos actuales de una pequeña fortificación medieval islámica: el Castillo de la Peña Foradá. 

Además de la prospección realizada y las catas efectuadas en el año 1.971 por el arqueólogo F. Félix, en el año 1.981 un grupo de trabajo del Museo Arqueológico “Camilo Visedo” de Alcoy, al frente del cual se encontraba el arqueólogo Federico Rubio Gomis, realizaron diversos trabajos arqueológicos en la zona, especialmente con la realización de tres importantes catas, que destacan sobre algunas más realizadas : La número 1 situada junto al muro de la parte alta del yacimiento, que tiene unas medidas de 1 x 1 metro, orientada de acuerdo con las coordenadas magnéticas; la número 2, abierta en el rellano que forma en la parte norte del yacimiento, tras atravesar el arco natural, con 2 x 1 metro de tamaño, y orientada al norte los lados mayores, y la número 3, situada en el ángulo suroeste del interior de la torre, de unas dimensiones de 2 x 1 metro, orientada en el mismo sentido que las paredes, profundizándose hasta la misma roca. 

Se trata de un yacimiento situado en un lugar estratégico, por dominar el paso único que por esta zona comunica los dos valles ya indicados, siendo este paso una escalera excavada en la misma roca. En el altozano, se determinan todavía por su lado sur los restos del antiguo trazado de la muralla, aunque el lugar está muy alterado por las labores agrícolas y por las posteriores construcciones medievales. 

La zona alta está acotada por un recinto de murallas hechas de grandes bloques de piedras, seguramente perteneciente al poblado de la Edad del Bronce que en el lugar existió, que, aunque escasísimos son los restos hallados en las exploraciones efectuadas, no hay duda alguna que se trata de fragmentos típicos de cerámica de esta época, que se conservan en el Museo Arqueológico de Alcoy, junto con otros encontrados en una exploración superficial de 1.980 realizada por el mismo museo alcoyano. 

Casi paralela a esta muralla, y por la parte interior acotando un pedazo más pequeño de la cima, se construyó la muralla medieval islámica, de unos 50 centímetros de grosor, conservándose una altura de 80 centímetros de media y fabricada con mortero sólido de cal y gravas. Partiendo de la base del arco natural se levantaba una torre de planta cuadrada cuya altura debió de ser considerable, hasta superar los casi 10 metros de desnivel que existe en el escarpe de ese lado con respecto a la cima. La torre, que debía ir adosada a la pared rocosa, pudo conectar con la muralla que protege el punto más alto, descrito anteriormente. El sistema de construcción difiere del de la muralla, al menos en la parte conservada, siendo de piedras unidas por argamasa de mortero de cal. En interior estaba enfoscado, y el suelo pavimentado por una capa endurecida con un cemento semejante al usado para el mortero, pero sin piedras. 

Su inicio es de la última etapa califal o inmediatamente posterior, desechando los restos de la Edad del Bronce, cuya atipicidad y escasez sólo nos permiten la asignación cultural y no la cronológica. Dada la ausencia total de referencias documentales sobre esta fortificación en las fuentes cristianas, las cuales no deberían faltar si el castillo hubiera permanecido en pie en tiempos del rey Jaime I de Aragón, pues su posición estratégica entre ambos valles citados, y especialmente el Vall de Alcalá, lugar de nacimiento del caudillo árabe Al-Azraq, y los intentos de glorificar al rey cristiano de sus cronistas, hubieran hecho de ella lugar muy nombrado, por lo que es de suponer que ya no era usada como lugar militar a la llegada de las tropas feudales, ni en periodos posteriores, lo que también está plenamente confirmado por la ausencia de cerámicas de Paterna o Manises, e incluso de cerámicas cristianas viejas. 

En cambio, la presencia de la punta de flecha de bronce hallada y fechable en los siglos XI y XII, junto con las cerámicas de vidriado verde pálido y blanco, cuya cronología abarca estos siglos y parte del XIII, con confirmarían plenamente una cronología puramente islámica y poscalifal. 

Por consiguiente, nos encontraríamos ante un yacimiento que sería una fortificación amurallada de corto periodo de ocupación que abarcaría los siglos XI, XII y primera parte del XIII, aunque se duda de que llegara a este último periodo, por las razones de su memoria ya olvidada en tiempos de Jaime I, como se ha dicho con anterioridad. Con todo ello, se podría decir casi con total seguridad de que la Fortaleza de Peña Foradá debió edificarse entre los años 1.076 y el 1.102, siendo abandonada o destruida hacia el año 1.147 y el 1.172.

Fuentes: Wikipedia
               Castillos de Alicante
               Guardianes de Piedra (MARQ,Alicante)

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lunes, 25 de diciembre de 2023

Fortaleza Medieval de Cieza (Murcia)

 


La Fortaleza Medieval de Cieza, también llamada Casa de la Encomienda, se encuentra situada en la localidad del mismo nombre de la Comunidad de Murcia. 


"Acto de presentación de los trabajos efectuados en la puesta en valor de la antigua Fortaleza Medieval de Cieza (Murcia), en cuyo interior se encontraban la Casa del Comendador de la Orden de Santiago, del siglo XV, el pasado 23-12-2023."

La sombra del pasado. La de los cuatro figurantes recuerdan simbólicamente una silueta medieval, la de los integrantes de la visita ordenada por los Reyes Católicos en el año 1495 a este emblemático lugar de Cieza. En su corazón histórico, los yacimientos arqueológicos a menudo lindan con las viviendas, y la antigua fortaleza cristiana no es una excepción. Las ruinas son tan evocadoras en la actualidad que, una incursión en la historia de la mano de la Hermandad de San Bartolomé, ayudó este sábado a comprender la importancia de la consolidación de los vestigios de la muralla y la torre del homenaje. Esa escenificación reforzó el sentimiento de unión con los ancestros que vivieron aquí. 

El Balcón del Muro ha sido, y continúa siendo, una ventana a la que asomarse y observar la huerta y el río Segura. Una puerta de entrada a un paisaje que forma parte de la identidad de Cieza a través del tiempo, aquel que nos ha hecho soñar y nos ha abierto la imaginación a los hechos históricos que inmortaliza el lema del escudo municipal: ‘Por pasar la puente nos dieron la muerte’. Aquí la leyenda se entrelaza con la realidad histórica. Las fuentes antiguas sitúan los hechos más sobresalientes de los orígenes de la actual Cieza. Las recientes excavaciones realizadas en la Casa de la Encomienda están sacando a la luz huellas inequívocas del primigenio asentamiento de los siglos XIV y XV. 

La tenue luz artificial realzaba anoche los dos lienzos de muralla de dos metros de altura que enlazan con las ruinas de la torre del homenaje donde emerge parte de su alzado original. Solo allí es posible comprender este baluarte defensivo en toda su dimensión, con su arquitectura y su planta cuadrangular concebidas a partir de 1479 como un todo, integradas en una sola unidad. La fortificación estaba rematada con cuatro torreones en sus esquinas, más una torre del homenaje, es decir, la principal y más reguardada de una construcción defensiva en la que el gobernador juraba defenderla y guardar fidelidad. Contemplando los elementos recuperados, pocos imaginarían que siempre han estado allí. 

Es curioso lo cerca que estábamos los ciezanos de esta construcción, sin saberlo. Y ahora es el momento de visitarla. Y es que la intervención llevada a cabo ha desenterrado estructuras de la fortaleza, de la que se tenía información sin sospechar siquiera su ubicación, levantada sobre la Cieza arrasada el 6 de abril de 1477. Mucho antes de que comenzara a intervenirse en la Casa de la Encomienda, el director del Servicio de Patrimonio Histórico, Joaquín Salmerón Juan, ya constató en una excavación de urgencia su existencia de la que daba testimonio la toponimia y la documentación conservada. Un hallazgo casual motivado por las obras de una cochera puso al descubierto en los años 60 un torreón. 

Acceder al recinto protegido por una valla es encontrase con las raíces históricas de la ciudad, es recorrer al ritmo de los siglos la huella que dejaron los innumerables habitantes a su paso. Los ciezanos han sabido resistir los muchos embates de su historia. Y también han sabido esperar para ver recuperada este simbólico lugar en cuyo interior también se erigió la Casa de la Encomienda. La residencia del comendador ha ido adaptándose con el paso del tiempo a las diferentes funciones que la historia le ha reservado. Todavía quedan lugares en el casco histórico tan bien conservados que se han convertido en recuerdos de cómo era Cieza en el pasado. De ahí su importancia de preservarlos a las futuras generaciones. 

La época de la historia que enciende las pasiones más fervientes entre los ciezanos corresponde al periodo medieval, cuando los habitantes de la villa hicieron frente a las invasiones, a la postre victoriosas, de las tropas nazaríes. Además de su pasado, lo que a un ciezano le llena de un orgullo sentimiento de patria chica es la historia heroica, algo que en las Fiestas del Escudo ‘La Invasión’ aflora por doquier. Si este pequeño trozo de la historia local, que tanto significa para la gente, no puede ser conservado, ¿qué podrá serlo?, se preguntaba un asistente al acto que congregó a la Corporación Municipal con el alcalde Tomás Rubio al frente, los diputados regionales Alberto Garre y Antonio Martínez y el presidente de la Hermandad de San Bartolomé, Cristóbal Herrera. 

En una esquina del Balcón del Muro ya son visibles los vestigios de la fortaleza levantada con piedras engastadas en mortero de cal, donde tal vez queden por efectuar importantes hallazgos en el futuro. El arquitecto municipal Juan Buitrago está entusiasmado con la consolidación de lo excavado, y con razón. Después de más de 500 años se ha redescubierto parte de su estructura que se estaba desintegrando, y sus muros no empotrados en el suelo estaban a punto de perderse para siempre. Un legado perdurable a pesar de que “queda mucho trabajo por hacer”. Para poder desentrañar mañana nuevos aspectos de la historia de este lugar, es preciso proteger hoy contra el deterioro implacable del tiempo.
(Texto de la inauguración de las obras de puesta en valor de este patrimonio local de Cieza (Murcia).

Fuentes: 
Amigos de Siyasa (Cieza, Murcia)
Joaquín Salmerón (Servicio del Patrimonio Histórico de Cieza)
Excmo. Ayuntamiento de Cieza (Murcia)
Pascual Gómez Yuste, Fernando Galindo y Joaquín Salmerón (Fotos)
Pascual Gómez Yuste (Textos)

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lunes, 11 de diciembre de 2023

Castillo de Alozaina (Málaga)

 


El Castillo de Alozaina se encuentra situado al lado de la iglesia de Santa Ana y cerca del Torreón de María Sagredo, en el punto más alto de la localidad del mismo nombre de la provincia de Málaga (Andalucía). 

El castillo está datado en el siglo XV, y aparece mencionado por primera vez en época nazarí, y las crónicas cristianas dan noticias de su rendición en el año 1484. Después de la rebelión de los moriscos, sobre 1568, se repuebla con cristianos. 

El nombre de Alozaina tiene origen árabe y significa pequeño castillo. Su castillo, de origen musulmán, protagonizó algunas de las historias y leyendas más excepcionales de la historias de nuestras tierras, de los que se vivió en siglos pasados. Fue durante el siglo XVI, durante las rebeliones moriscas, cuando se produjo una de ellas, muy singular, protagonizada por la pechera –uno de los gentilicios más particulares de la provincia– Maria Sagredo y su hazaña. 

Cuenta la leyenda que el 6 de julio de 1570, una tropa de unos 600 hombres acaudillados por El Yebali y Lorenzo Alfaqui comenzaron un ataque rumbo a la villa. Iban disfrazados de castellanos como factor sorpresa para una villa que tenía tan sólo unos 80 ciudadanos. De estos 80, en el pueblo sólo había siete hombres en buen estado para defenderse del ataque. Fueron las mujeres las que, disfrazadas de hombres, tomaron las armas y subieron al campanario, hacer sonar la campana e ir directo al castillo para defenderlo. Hasta tres veces intentaron el asalto y hasta tres veces los pueblerinos los rechazaron. 

Aunque del castillo original sólo se conservan algunos restos de muros y torreones, restauraciones acometidas en los años cincuenta, intentando recomponer la antigua fortaleza, lo han reconvertido en un Parque Mirador desde el que se divisa el contraste entre la Sierra Prieta y la hoya de Málaga. En este parque se celebran las principales fiestas del pueblo. 

También formaba parte del castillo el llamado Torreón de María Sagredo. 

Fuentes: castillos.net
                Wikipedia
                L.C. Margallo (Fotos)

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domingo, 10 de diciembre de 2023

Castillo de Benaladid (Málaga)

 


El Castillo de Benaladid, conocido localmente como "Las Cuatro Torres", es una fortificación situada en el casco urbano de la localidad de Benaladid de la provincia de Málaga (Andalucía). 

En el año 711, Benadalid fue conquistado por el jefe bereber Zayde ibn Kesadi. Se reforzó la fortaleza existente, afincándose una población con el nombre de Beni al-Jali, que, según Dozy,, esta voz proviene de la tribu berberisca del mismo nombre. Por otra parte, el profesor Acién Almansa sostiene que el topónimo vendría de Bina al Dalid, el caserío de Adalid. En el siglo VIII toma parte activa en las insurrecciones y revueltas de la serranía bereber, interviniendo en el advenimiento del emir Abderramán I. Formó parte de los reinos de Sevilla y Málaga, soportó el peso de los meriníes y pasó al reino de Granada por el tratado firmado en el año 1286. Durante los siglos XII al XV quedó vinculado a las alternancias de dominio andalusí y magrebí. 

En el último tercio del siglo XV fue conquistado por los Reyes Católicos. Según Sierra Cózar, por una Real Cédula dada el 3 de abril de 1494, se concedieron a Gómez Suárez de Figueroa, Conde de Feria, las villas de Benadalid y Benalauría, con capitalidad en Benadalid, en calidad de señorío. Esta concesión se complementa con otra cédula, de igual fecha, facultando al conde para "labrar e faser y hedificar una fortaleça". Como ya existía un castillo nazarí no necesitó grandes gastos. Después de diferentes avatares de la población de Benadalid, el Ayuntamiento, en el año 1821, tomó posesión del castillo para la construcción de un cementerio. 

Está situado en un promontorio rocoso que termina bruscamente en un cortado, y la fortaleza es de planta sensiblemente cuadrada, en forma trapezoidal, con el acceso principal en la base mayor orientado al noroeste. La fábrica de los muros es de mampostería trabada con mortero de cal. 

Conserva tres torres de planta circular en otras tantas esquinas, faltando la cuarta, correspondiente al ángulo sudeste. La puerta presenta escudos y una leyenda que se fecha en 1635, durante el reinado de Felipe IV. Adosada al lienzo donde se sitúa el acceso hay una torre más, de sección cuadrangular. A diferencia de las otras dos torres macizas, la torre sur ha tenido función habitacional. En el centro del recinto se sitúa un aljibe. 

El interior alberga, como hemos indicado, el cementerio de la localidad. En el espacio central se realizan los enterramientos en el suelo, y se adosan hileras de nichos y bóvedas trasdosadas a los paños de la muralla, que constituye el cerramiento del conjunto. En el centro del patio se sitúa una farola. 

Se accede por una explanada delantera, muy utilizada, como solana y mirador. En ella se sitúa un monumento conmemorativo de labra actual sobre sillares reaprovechados. Esta zona se ha pavimentado con cerámica y dotado de barandas y bancos, utilizando también el ladrillo visto. A ella abre una portada blasonada. No hay sepulturas sobresalientes entre un conjunto de bóvedas trasdosadas, en buena parte espontáneas, que ya acusan la incorporación de materiales contemporáneos. El cementerio se considera inmemorial. 

En Diciembre de 2021 comenzó una reparación por los daños sufridos por la borrasca Elsa en la provincia. Los trabajos se centrarán en la reconstrucción del muro derecho del castillo con piedra y argamasa en consonancia con el resto del muro afectado. Todo el proceso contará con supervisión arqueológica así como el visto bueno y autorización favorable de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico. 

Fuentes: Wikipedia
               castillos.net
               Ayto, de Benaladid

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miércoles, 18 de octubre de 2023

Torre de las Palomas (Águilas, Murcia)

 


La Torre de las Palomas, también conocida como El Torreón, se encuentra situada a pocos metros de la gran via de circunvalación, dentro de una gran finca llamada Hacienda Casa Grande, a un par de kilómetros del casco urbano de la localidad de Águilas en la Región de Murcia. 

Se localiza cercana a la rotonda que da comienzo a la carretera hacia la localidad de Lorca, por lo que es fácilmente visible, formando parte de la susodicha hacienda. Fue reconstruida en el siglo XVIII y pertenece a la propia Hacienda Casa Grande. Pese a su aspecto militar tiene mayor valor simbólico señorial. 

Se cree que es el resto de una pequeña torre de vigilancia de costa del siglo XVI utilizada como puesto de control ante los ataques berberiscos a las costas de Murcia y que posteriormente fue utilizada como palomar, y de ahí le viene el nombre. 

Se trata de una torre circular dividida en dos cuerpos, con fábrica de mampostería y forma troncocónica. Tiene aproximadamente unos 14 m. de altura, con 6 de diámetro en la base. En su parte superior guarda el mismo estilo que la Casa Grande, situada a 250 m, con utilización del ladrillo para el remate decorativo y las almenas, disponiendo de una escalera de caracol interior para el acceso a la habitación superior. 

Su estado es de abandono total. Sus accesos han sido tapiados; el interior está en ruinas, habiendo perdido las almenas y el deterioro es constante. 

Fuentes: castillosricsol. es
               castillos.net
               sobrino (Fotos)

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