El Castillo de Bentomiz se localiza en un monte a 709 m. de altitud en las cercanías de la localidad de Arenas, en la provincia de Málaga (Andalucía).
A
día de hoy (28/04/2018), el Castillo de Bentomiz es una buena «finca
de almendros», de olivos salpicados y un lugar para disfrutar de
unas maravillosas vistas de la Axarquía y de la costa malagueña.
Debido a su situación y acceso con un gran desnivel, creemos que la
visita no es recomendada, el castillo se encuentra en ruina total.
Su privilegiado emplazamiento le permite abarcar a simple vista la
mayor parte de las poblaciones de la comarca, así como una amplia
zona de la costa Mediterránea.
Al
parecer esta fortaleza fue en principio poblado ibérico, sobre el
que fenicios y griegos establecieron algunas factorías, pasando
posteriormente a poder de los cartagineses y, tras las guerras
púnicas, a los romanos. La fortaleza fue reedificada por los árabes,
conocedores de la importancia que para ellos podía tener como lazo
de unión entre el reino Nazarita y el Norte de África, siendo desde
el siglo XI el centro rector de un amplio distrito administrativo que
controlaba a numerosos núcleos de población, y convirtiéndose en
uno de los centros fortificados más importantes de Andalucía
Oriental, tanto por su estratégica ubicación como por sus
dimensiones.
En
sus más de 40.000 m2 de terreno amurallado se distinguen dos grandes
zonas: la ciudadela y un extenso espacio llamado albarcar, que se
destinaba a dar protección a los aldeanos y sus ganados en tiempos
de peligro. Contaba también, al menos, con tres accesos, dos desde
el albarcar y uno flanqueado por dos fuertes torres en la parte norte
para el recinto principal.
En
el año 1.487 Bentomiz jugará un importante papel en la conquista
de Vélez Málaga y
su tierra, a decir de algunos cronistas. El alcaide del Castillo de
aquella época que era El Gibis, contrario al rey de Granada El
Zagal, entregó la fortaleza a los cristianos sin sufrir asedio. Tras
la rendición, el Castillo se convirtió en una pieza clave para
controlar una zona de abundante población morisca, que demostrará
su importancia militar cuando se produzca la rebelión de los
moriscos de 1.570.
A partir de esta fecha comienza para el Castillo de Bentomiz un periodo de abandono que lo lleva al estado de ruina en el
que lo encontramos actualmente, aunque aún conserva aljibes
subterráneos, torres y restos de muralla, además de unas estupendas
vistas que dan honor a su nombre: Bentomiz, monte desde donde se ve
el mar.
Fuente: Wikipedia
Aurora Ruz (Fotos)
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