El Castillo de Fantova esta localizado en la población homónima de la provincia de Huesca (Aragón).
Las
primeras noticias del castillo de Fantova se remontan al año 960,
cuando el obispo de Roda consagró la iglesia de Santa Cecilia en el
castro de Fantova.
El
castillo está situado sobre un gran espolón rocoso al borde de un
acantilado, visible desde varios kilómetros de distancia. El
conjunto lo forman la ermita de Santa Cecilia y la torre, así como
un recinto murado. La torre es circular con un diámetro de 4,55
metros, 2 metros de grosor y 18 de alto. Tiene un espacio hueco
de 16 m2, muy similar al de la torre de Viacamp con 16 m2, 15
m2 la de Laguarres y 15 m2 la de Montañana.
Está
construida en mampostería revestida por sillarejos grises. La planta
baja conserva su bóveda de piedra en forma de arista que resuelve
el paso del círculo al cuadrado. La puerta está situada en altura y
es de arco de medio punto a la cual se accede mediante una escalera
con balcón de madera. Desde esta planta, de piso de madera y
cubierta de bóveda de cañón se llega a lo alto de la torre por una
escalera empotrada en la pared.
Este piso es totalmente
defensivo con grandes vanos de medio punto ligeramente derramados al
interior. Se observan saeteras de traza muy tosca en toda la torre.
Tras la restauración llevada a cabo a principios de los años 90 el
remate es almenado, aunque afirman varios historiadores como Esteban
Lorente y Galtier Martí, que sobre este piso había otro más a modo
de falsa, con siete vanos anchos y bajos, sobre los cuales iría una
cubierta de madera en forma cónica. Como ocurrre con la actual
escalera de madera orientada a la prevención de accidentes, la
original debía poderse retirar en caso de ataque para hacer el nivel
de la puerta inalcanzable en altura.
La
ermita de Santa Cecilia es de nave única con ábside semicircular,
sin decoración. A sus pies se alza un campanario de planta
semicilíndrica, de piedra similar a la otra torre, concebida como
segunda torre defensiva. Sobre la puerta tiene una cruz esculpida y
en su interior conserva la pila bautismal.
Del recinto murado destaca la entrada en recodo. Se encuentra muy rebajado en altura y además la vegetación impide ver con claridad sus restos.
Completan
el conjunto dos tumbas antropomorfas, según costumbre en los siglos
X y XI de la zona prepirenaica.
Fuentes: Wikipedia
castillos.net
aragonromanico.org
Eduardo Argote (Fotos)
Galería:
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