El Castillo de Estopiñán, también conocido como Castillo de los Condes de Ribagorza, se encuentra localizado en el casco urbano del municipio del mismo nombre en la provincia de Huesca (Aragón).
Los
restos del recinto amurallado se encuentran sobre la base de un
espectacular espolón rocoso, prácticamente inaccesible, desde el
que se domina la población. Se compone de un recinto estrecho y
alargado, de unos 18 metros en la parte más ancha por 100 la más
larga.
Está protegido por un ancho muro de mampostería, ya muy
rebajado en altura y de gran longitud, reforzado por cuatro cubos
rectangulares de gran tamaño por el lado que mira hacia la villa, la
obra de sus muros es heterogéneo, de diferentes etapas de
construcción, con tres cuerpos diferenciados dos en línea y otro
tercero retraído, son de obra de sillarejo y mampostería con
argamasa, aunque aparecen arreglos.
La
puerta del recinto pudo abrirse al sur en altura ya que todavía se
observa una jamba, también se abren aspilleras a lo largo de los
muros. Interiormente está lleno de vegetación y escombros del
propio castillo y otras construcciones modernas, como el depósito de
agua de la localidad, muy cerca del aljibe del castillo.
El
lado opuesto a la localidad carece de fortificación, ya que las
lisas peñas y la enorme altura de las mismas forman un
amurallamiento natural.
Fuentes: Wikipedia
castillos.net
aragonromanico.org
Galería:
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