El Castillo de Villagarcía de la Torre es una fortaleza del siglo XV que se encuentra situada en la población del mismo nombre en la provincia de Badajoz (Extremadura).
La población ya existía en época musulmana. El padre Fray Juan Mateo Reyes Ortíz de Tovar cita en su obra la ciudad romana de "Vama", cuyo nombre se disputaban Villagarcía y Salvatierra de los Barros. El lugar de Villagarcía estuvo a caballo entre los reinos de taifas de Sevilla y Badajoz. Fue dominada por los moros y la conquistó don Rodrigo Íñiguez, que fue decimoquinto Maestre de la Orden de Santiago desde 1327 a 1242.
En el año 1367 la mitad era de la Orden de Santiago y la otra mitad del Comendador Mayor de León, don García Fernández de Villagarcía, que la repobló de cristianos y le impuso su propio nombre y "de la Torre" se justifica por la existencia de una notable torre construida por los antiguos moradores del lugar. Hacia el año 1330 era señor de la población don Gómez González de Quijada y en 1332 el rey Alfonso XI dio el lugar de Villagarcía a Leonor de Guzmán. Don García Fernández de Villagarcía, 36º Maestre de la Orden de Santiago, primer Señor de Villagarcía, sirvió con lealtad al rey Enrique II y a su hijo Juan I, y como premio a su fidelidad le concedió en el año 1386 el señorío autónomo de Villagarcía, y para ello hubo que segregar la villa de la jurisdicción de la Orden de Santiago, pues estaba dividida en dos.
En el año 1387, en nombre del rey, se le otorgaba escritura de posesión de la villa a Garci Fernández de Villagarcía y a su esposa María Ramírez de Guzmán. Doña Teresa de Guzmán, hija de Garci Fernandez de Guzmán y de Beatríz Suárez de Figueroa se convertiría en el año 1430 a la muerte de su madre en la III Señora de Villagarcía. Casada con Luis Cristóbal Ponce de León, éste mandó construir el castillo, quizás sobre la antigua "casa-fuerte" de Garci fernández y construyendo o reformando la Torre del Homenaje. Hoy se puede admirar el escudo de armas de Luis Ponce de León en el torreón principal de la fortaleza.
El castillo señorial fue construido en el siglo XV. El recinto que lo rodea es de forma cuadrangular irregular con cubos (torres adosadas) redondos y unidos a la muralla por un pequeño retranqueo curvo que da a la sección transversal de estas torres la "forma de pera", sobresaliendo de la voluminosa torre del homenaje. En ésta no se aprecian los detalles constructivos. El castillo consta de dos recinto: el primero, o exterior, hace la doble función de muro de contención del terraplén y de la muralla, donde se conserva la torre del homenaje y otros restos, y hacia la mitad del lienzo norte destaca una torre semicircular. El segundo recinto es el importante e impresiona ver la elevación de la fortaleza, de sus murallas y torres.
Las medidas de este recinto son de 29,70 m. de largo y 21,79 de ancho y tiene torres cuadradas en los ángulos. El espesor de los lienzos es de 2,75 m. y en el interior de ellos se ven los mechinales que dejan noticia de que el castillo tenía tres pisos. También de los restos de las escaleras adosadas para subir al adarve. El castillo se mantuvo intacto hasta la Guerra de la Independencia durante el que sirvió de hospital a las tropas francesas. Posteriormente fue arrasado en casi su totalidad por el general Morillo durante las Guerras Carlistas.
Fuentes: Arte en ruinas
Edujoser
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