El Castillo de Puebla del Maestre, también llamado Torreón de Cárdenas, se encuentra situado en el municipio del mismo nombre en la provincia de Badajoz (Extremadura).
Del
castillo original sólo queda en pié el poderoso torreón, en
aceptable estado de conservación se
encuentra a las afueras de la población. Esta villa fue propiedad de
la Orden de Santiago y personajes privados. En 1475 el Maestre de la
orden, don Alonso de Cárdenas, compró la villa ostentando un
señorío otorgado por los Reyes Católicos, para más tarde
concederle el título de condado de Cárdenas.
La
primitiva villa fue conquistada por las tropas de Alfonso IX de León
en 1199. Adquirió condición de Señorío en el siglo XV, siendo
maestre de la Orden de Santiago don Alonso de Cárdenas, figurando
sus armas en el único blasón que se conserva en la localidad. Más
tarde alcanzó el título de Condado con grandeza de España. En
principio, el emplazamiento no ofrecía mucho interés, dado que se
hallaba alejado de las principales vías de comunicación de la
época.
La
villa pasa sucesivamente de manos privadas a las de la Orden de
Santiago, mediante compras y permutas, hasta que en 1475 el maestre
de esta Orden, Alonso de Cárdenas, la compra, con lo que unifica la
propiedad. De los cambios de señorío a los que se ve sometida la
villa dan muestra sus continuos cambios de nombre: Puebla de la
Fuente, Puebla de Hernán González, Puebla de doña María Ramírez,
Puebla de Cárdenas y, por último, Puebla del Maestre
El
castillo, aunque contiene influencias árabes, no se edifica hasta
1483 (siglo XV), en un lugar elevado a 550 metros de altitud desde el
que se domina parte de la Sierra Morena. Del primitivo recinto queda
en pie la Torre del Homenaje, que debía estar en una esquina de la
muralla. En su día, esta torre estaba compuesta por tres cuerpos
cúbicos, de los que se conservan dos, de 12 metros de lado en su
base y alrededor de 25 metros de altura fabricado en mampostería de
piedra y cal con hiladas de ladrillo.
En
un principio poseía tres cuerpos de los cuales solo quedan dos, ya
que el tercero se derrumbó. El primer cuerpo es muy espacioso, lo
ocupa la planta baja, y parece ser que en la antigüedad podía ser
utilizado como mazmorras o almacén de cereales. El acceso a la
segunda planta se hace a través de una escalera. Hay que destacar la
inmensa bóveda hecha de cal y grandes piedras terminando en un gran
orificio, para iluminar el salón. Una escalera de caracol une la
segunda planta con la azotea. La estructura está dividida en altura
en dos partes, siendo la superior algo más estrecha, con algunos
huecos y restos de matacanes. La torre fue fabricada en mampostería
de piedra y cal con hiladas de ladrillo.
El
cuerpo inferior es recio, con escasas aberturas, denotando así su
carácter defensivo, mientras que el segundo, más pequeño, ya
dispone de ventanas y acogía las estancias de los señores de la
villa. A esta planta se accede por una escalera interior, y destaca
su gran bóveda con un orificio para dar luz y ventilación.
Fuente: Ayuntamiento de Puebla del Maestre
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