El Torreón de Villacid de Campos, también llamado "El Cubo", se encuentra situado en la localidad del mismo nombre en la provincia de Valladolid (Castilla-León).
Perteneció
a los Osorio, que fue la primera nobleza en España. El tronco de
este linaje fue D. Osorio, caballero principal que vivió el reinado
de D. Rodrigo, el último monarca godo, y en los primeros años del
reinado de D. Pelayo, al cual acompaño en la restauración de
España. Aquí empieza la historia, porqué a partir de aquí sus
descendientes repetirían nobleza en múltiples ocasiones en las
órdenes militares de Santiago Calatrava, Alcántara y Carlos III.
No
residían en el castillo, si no en el «palacio señorial» al lado
de la fortificación. Dicha fortificación fue una estrategia, se
construyó en el último tercio del siglo XIV. El siglo XV es el
siglo del castillo-palacio nobiliario. Desde su último cuarto de
siglo, el progreso de la artillería obliga a las fortalezas y
murallas urbanas a una rápida adaptación a las nuevas armas, pero
también la centralización de las monarquías provoca una falta de
atención hacia los castillos.
La
artillería sirvió a los monarcas renacentistas para reducir el
poder militar de la alta nobleza. El poder de las baronías decae y
la defensa de un reino centralizado se basa, como en el antiguo
Imperio romano, en las ciudades regias y en las murallas de dichas
ciudades. Salvo pocas excepciones, las mansiones de nueva planta que
levantará la nobleza a lo largo del siglo XVI, carecerán de toda
utilidad bélica, y aunque seguirán conservando sus castillos
medievales, su poder militar es prácticamente nulo.
Es
posible que date del siglo XI o XII, ya que se atribuye a una antigua
fortaleza que fue derruida y que perteneció a Rodrigo Díaz de
Vivar, El Cid Campeador. Hoy solo queda en pie dicha torre.
De
planta circular, se trataba de una atalaya, cuya entrada se
realizaría por alto a través de un arco rebajado enmarcado por
alfiz. ¿Que hay encima del torreón? Una cara, un escudo, pero
realmente son las dos cosas, pero nada que ver con la cara del Cid,
si no con el escudo de los Osorio.
Fuente: Castillos del Olvido
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