viernes, 20 de marzo de 2020

Castillo de Ayllón (Segovia)


El Castillo de Ayllón se encuentra situado en las inmediaciones de la localidad del mismo nombre en la provincia de Segovia (Castilla-León). 

El enclave se localiza inmediatamente al noreste del casco histórico de Ayllón, en la parte alta de la paramera que domina el valle del río Aguisejo. En la prospección de 1991-1992 se documentaron en superficie cuatro zonas diferenciadas con restos arqueológicos dentro de este extenso yacimiento. La primera de ellas, denominada como “Cerro de la Martina”, es un espacio localizado en el sector oeste del yacimiento en el que se incluyen restos de la muralla medieval, conservados al sur y oeste del cerro, además de restos de la línea defensiva (en la zona más septentrional) que se califica cronológica y tipológicamente como árabe y que está realizada en tapial. 

La parte de la muralla que se ubica al oeste se corresponde con la construcción denominada “La Martina”. Se trata de una torre poligonal en quilla, realizada en caliza roja, que probablemente formase parte de la antigua muralla medieval, junto con los basamentos de tres torres localizadas en su entorno. Dentro de este espacio se encuentra la antigua Iglesia de San Martín, muy próxima a la Torre de la Martina. 

Junto a los muros norte y oeste del templo se observan una buena cantidad de tumbas en cista, excavadas en su mayoría en los años 70 por Alonso Zamora. Esta iglesia de San Martín perdió el beneficio de parroquia y se encuentra sin culto desde el año 1796. En todo el recinto amurallado superior hay restos de las excavaciones de Alonso Zamora y de otras antiguas excavaciones arqueológicas que han dejado al descubierto los muros de diferentes cubos de la línea defensiva del recinto alto. 

La segunda zona, se corresponde con una elevación que se localiza al noreste de la Torre de la Martina. En este espacio hay una concentración de restos cerámicos realizados a mano junto con piezas celtibéricas, en un manchón ceniciento de unas dimensiones aproximadas de 65 por 30 m. El tercer espacio, es otra elevación del terreno ubicada al noreste de La Martina donde se localizaron pizarras con motivos numéricos y geométricos, además de cerámica a mano y, en menor medida, moderna, y especialmente vajilla celtibérica. 

Este yacimiento del Castillo de Ayllón debe tener sus orígenes en la Primera Edad del Hierro, tal y como reflejan algunas cerámicas (entre las que destacan las decoradas a peine, recuperadas en las diferentes actuaciones arqueológicas en el alto del cerro). Con posterioridad, en época celtibérica, hay una importante ocupación del espacio, tal como demuestra la proliferación de materiales correspondientes a este momento, y muy probablemente parte del amurallamiento prerromano coincidiese con el posterior medieval. 

A partir del siglo XI comienza la ocupación cristiana, a la que se adscribe la construcción de muralla medieval, la Torre de La Martina, la iglesia de San Martín y la ermita de Santiago. Al respecto de este recinto medieval, se debe reseñar que convive y forman parte de la misma línea defensiva los restos más antiguos, denominados árabes, y realizados en tapial. También se debe constatar la presencia de un claro foso, que sondea Alonso Zamora en los años 70, al Éste se localiza justo al sureste de La Martina, entre ese tramo de lienzo y las primeras edificaciones del pueblo, aunque se encuentra bastante camuflado por rellenos posteriores. 

También Alonso Zamora refiere la posible presencia de un segundo foso más dudoso, ubicado al norte de los paredones árabes. En 1991, M. I. García Muñoz, M. R. Pérez Martín y E. Pérez Navarro elaboraron la documentación básica del Castillo de Ayllón. Esta fortaleza existe al menos desde el siglo XI, contando con referencias documentales que mencionan la estancia de algunos reyes en la misma. El ataque de los franceses en 1808 acabó con ella. 

Las estructuras defensivas más antiguas son los muros de Los Paredones, de arquitectura árabe califal (siglo X) y fábrica de tapial forrado de piedra y ladrillo. Con posterioridad, el recinto sufrió varias ampliaciones, levantándose en 1327 la Torre de La Martina. 

Fuente: Castillos del Olvido

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