Las Murallas de la Axerquía se encuentran situadas ocupando la parte oriental del casco urbano de la ciudad de Córdoba, capital provincial de Andalucía.
Cuando
Fernando III el Santo entró en la ciudad de Córdoba, ésta se
encontraba dividida en dos sectores amurallados principales, el
recinto de la Medina en la parte alta, que bajo el dominio de los
nuevos señores pasó a llamarse recinto de la Villa, y el recinto de
la Axerquía, más amplio, bajo y plano que el anterior. Estos dos
recintos se encontraban separados por el lienzo oriental de la
muralla de la Medina, y se comunicaban por tres puertas y dos
postigos, existiendo una gran explanada a lo largo de este
lienzo.
Durante los siglos bajomedievales la ciudad se
expandió por el oeste y suroeste con el barrio de San Bartolomé, el
Alcázar de los Reyes Cristianos, y los recintos llamados Castillo de
la Judería y Alcázar Viejo y numerosas huertas, entre ellas las del
Alcázar de los Reyes Cristianos y algunos monasterios.
Desde
entonces la estructura urbana de la ciudad permaneció dentro de sus
murallas, sufriendo pocas variaciones desde la época medieval. En
los primeros años del siglo XVI se abrió una nueva puerta de acceso
a la ciudad y una nueva vía de comunicación entre los recintos de
la Villa y la Axerquía. A partir de ese siglo, las murallas de
Córdoba entraron en un periodo de deterioro progresivo, como
consecuencia del paso del tiempo, de determinadas actuaciones
delictivas y del derribo de algunos trozos de murallas y torres con
fines prácticos y estéticos. Aunque durante el siglo XVII y
principios del XVIII se intentaron conservar y reparar las murallas,
el elevado coste de las obras hizo que se tuvieran que derribar
algunos lienzos, torres y puertas.
También a principios de la
segunda mitad del siglo XIX se derribaron algunos lienzos de muralla
y puertas, como las del Rincón, Gallegos, Andújar, Sevilla (en el
recinto murado del Alcázar Viejo), Osario, Nueva y Baeza. También
se remodelaron las puertas del Puente y Almodóvar, y se abrieron dos
nuevas, la de San Martín, o Gran Capitán, y la de
Trinidad.
Posteriormente fueron reconstruidas algunas puertas
y lienzos de muralla, como la puerta de Sevilla. Actualmente
permanecen las puertas de Almodóvar, de Sevilla, del Puente, y
algunos tramos de murallas y torres.
La
ciudad de Córdoba ha estado amurallada desde muy antiguo, pudiéndose
distinguir cinco recintos murados: la Villa o Medina, la Axerquía,
el Castillo de la Judería, el Alcázar Viejo y la Huerta del
Alcázar.
Del recinto murado de la Axerquía sólo quedan
algunos tramos de muralla y torres, destacando el existente en la
ronda del Marrubial, al este de la ciudad. La torre albarrana de la
Malmuerta también se encontraba adosada a este recinto, al norte del
mismo.
Aunque el lienzo de la Ronda del marrubial es el más
extenso, aún se conservan algunos restos que permiten adivinar el
trazado original del recinto. Estos restos, englobados en la trama
urbana, se encuentran en las calles Adarve, Muro de la Misericordia,
y Fernando de Lara, en la Ronda de los Mártires y en la Plaza del
Gamo.
En
el lienzo de la Ronda del Marrubial puede verse su zócalo de piedra
y su alzado de tapial. Aún quedan importantes tramos de murallas,
torres y puertas.
Fuentes: Wikipedia
castillos.net
garcilanga (Fotos)
Galería:
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