Murallas de Cervera (Lleida)

 

Las Murallas de Cervera se encuentran situadas en el casco antiguo de la localidad de este mismo nombre en la comarca de la Segarra de la provincia de Lleida (Cataluña). 

El recinto amurallado original es del siglo XIII, aunque la obra importante y ampliación del mismo fue hecho durante el siglo XIV y parte del siglo XV. Por el año 1368 el rey Pedro el Ceremoniós da la orden de construir muros que convirtiesen a la ciudad en una fortaleza. En algunos de sus portales se instalaron puertas de cierre, como en Santa María, Agramunt, Oluja o Les Verges. Delante de portal de Santa María, después renombrado Portal de la Cadena, en el año 1378 se hizo construir un puente levadizo para entorpecer la entrada a la ciudadela. 

En el año 1388 las torres de la muralla fueron ofrecidas a los particulares para hacerse cargo de ellas y las hicieran habitables a cambio de su mantenimiento en buen estado, pues ya se encontraban en mal uso. En 1393 aún seguían las obras de las murallas. En el año 1424 los guardianes de los portales seguían con su labor. 

En el año 1462 Cervera era la “... plus forta plaça que sia en tota aquesta terra...”. En el 1706 el representante austracista Darmstadt da la orden de derruir todas las murallas en 15 dias, pero como era imposible cumplir la orden, ésta fue conmutada por la presencia constante de 70 hombres bien pertrechados en armas para guardar el recinto amurallado de Cervera. 

Calles estrechas y empinadas, barrios en pendiente, callejones cubiertos que nos transportan a épocas pasadas, con presencia de brujas y sus aquelarres, y por supuesto, con sus murallas como gran rasgo distintivo son alicientes y motivos suficientes para ir de escapada hasta Cervera, un municipio con un conjunto patrimonial de primer nivel, ya que tienen hasta once monumentos declarados Bien Cultural de Interés Nacional, entre ellos, naturalmente, sus murallas. 

Actualmente sólo se conserva el perímetro que rodea la calle Santa Anna y la Plaza Mayor, aunque en su origen, en el siglo XIV, durante el reinado de Pere III el Ceremoniós, las murallas tenían una longitud de casi 3 kilómetros, y servían como elemento defensivo. La fortificación se completaba con un foso de 8 metros de ancho, barbacanas, taludes, almenas, cadafales y pasos de ronda. 

Fuentes: Wikipedia

               Cataluña Medieval

               Ayto. de Cervera

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