El Castillo de Pallargues se encuentra situado en la entidad poblacional de este mismo nombre en el municipio de Els Plans de Sió en la comarca de Segarra de la provincia de Lleida (Cataluña).
Se
trata de un castillo-palacio medieval que fue rehabilitado a partir
de un castillo del siglo XI. Se documenta este castillo desde el año
1061 en que se le denominaba d'Espallargues en referencia a los
pallers. En el año 1315 era propietario del castillo Don Berenguer
de Rajadell, y más tarde los señores de Concabella, quienes lo
conservarían durante parte del siglo XIV y parte del XV.
A
finales del siglo XVI pertenecía a la familia Argençola, que
emparentó en el siglo siguiente con los Rocabertí. En el año 1705,
el señor del castillo, Jeroni de Rocabertí, tuvo que huir
temporalmente a Madrid por su fidelidad a Felipe V durante la Guerra
de Sucesión. Después de diversos cambios de titularidad, el
castillo fue adquirido por la familia Rovira, la actual propietaria,
que lo ha reformado para poder visitarlo.
Este
castillo que se construyó en un emplazamiento aislado y en el punto
más alto junto al río Sió, poco a poco se vio rodeado de casas a
su alrededor hasta formar un núcleo urbano.
Su
planta es muy irregular, y está constituido por tres polígonos de
diversas medidas, seguramente debido a sucesivas ampliaciones, siendo
el cuerpo central el más antiguo.
En
el exterior del castillo destaca la fachada principal, con un
majestuoso arco gótico de 13 metros de altura y un curioso torreón
cilíndrico en una esquina.
Ya
en el interior, en la planta baja hay una serie de dependencias
destinadas a los servicios, tales como las cuadras, con una
interesante colección de utensilios tradicionales, la antigua sala
de la guardia o las bodegas.
A
través de una escalera de piedra se accede a la planta noble,
presidida por la Sala de los Capítols, espacio sobrio y elegante de
techo altísimo y puertas de madera trabajada.
El
salón está rodeado por diversas salas, tales como el antiguo
dormitorio, la Capilla de Sant Miquel, etc., y da acceso a una
terraza con buenas vistas sobre la Segarra.
En
el patio una escalera de caracol conduce a las prisiones
subterráneas. También posee un pozo de hielo, una bodega con
viejas botas y una curiosa fuente de donde salía el vino fermentado
en una gran tina anexa, y el sistema de canalización empotrado en la
piedra para recoger las aguas pluviales.
Fuentes: Wikipedia
castillos.net
Cataluña Medieval
Galería:
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