El Castillo de Ratera, también llamado Castillo-Molino de Ratera, se encuentra situado en el lugar de Ratera, núcleo de población del término municipal de la localidad de Els Plans de Sió de la comarca de la Segarra en la provincia de Lleida (Cataluña).
Se
trata de una edificación del siglo XIV, pero la primitiva
construcción es del siglo XII. Está incluido dentro del término
del Castillo de Concabella, del cual fue una fortificación
secundaria. Del lugar de Ratera surgió un pequeño linaje
nobiliario: Pere de Ratera se documentó en 1164 y Berenguer de
Ratera, canónigo de Solsona, en el año 1222.
Mientras
que Ratera estuvo ligada a los señores de Concabella, por ejemplo en
ek siglo XV a los Ortiz de Cabrera i Oris, perteneció a la canónica
de Santa María de Guissona hasta la desamortización del siglo XIX.
El castillo fue reconstruido en los siglos XIV y XV para convertirlo
en un gran casal gótico a las afueras del pueblo. Hacia el año 1530
se transforma en un molino harinero para aprovechar las aguas del río
Sió. A mediados del siglo XX, su propietario, el arquitecto Joaquim
Vilaseca, lo restaura completamente.
El
castillo-molino se sitúa en un descampado a la derecha del río Sió
y así utilizar el agua para hacer funcionar el molino de harina, que
actualmente está en deshuso. La construcción original está formada
por dos volúmenes rectangulares, visibles en la fachada principal y
encajados por una torre cilíndrica que actúa como una escalera
circular que arranca en la sala noble, y acaba en forma plana.
Esta
realizado con sillares regulares de dimensiones medianas y en su
cubierta varía según el cuerpo del edificio de que se trate.
Dispone de planta baja y tres plantas superiores. Destaca el análisis
que de las ventanas se saca mostrando la variedad de intervenciones
que ha habido a lo largo del tiempo.
Al
cuerpo utilizado como habitacional se accede a nivel de la parte más
baja del ataluzamiento, donde se encuentra el molino y aparece la
puerta principal con arco de medio punto adovelado y escudo
nobiliario en la clave. Por encima de ésta encontramos dos ventanas
con rejas de hierro forjado exteriores, acompañados de otra puerta
de menores dimensiones, con arco de medio punto también adovelado.
En la tercera planta encontramos unas pequeñas ventanas de arco de
medio punto acompañadas por dos matacanes con aspilleras.
En
el cuerpo situado más a la derecha, que queda unido al anterior por
el cilindro central, encontramos dos aberturas: una inferior de
pequeñas dimensiones y otra superior de mayores dimensiones con
dintel muy trabajado. En la fachada lateral de este cuerpo del
edificio es donde se encuentran los elementos conservados del molino
harinero. Finalmente, destacar que en el tercer cuerpo del edificio
situado a su izquierda, hay un segundo cilindro situado a la parte
posterior, que corresponde a las reformas efectuadas en el siglo XX.
Fuentes: Wikipedia
castillos.net
Cataluña Medieval
Galería:
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