El Castillo de Trasmoz, también conocido como Castillo de las Brujas, se encuentra situado en la localidad del mismo nombre en la provincia de Zaragoza (Aragón).
Trasmoz
pertenece a la comarca de Somontano de Moncayo, y se encuentra en
plena Sierra de Moncayo, que comparten las provincias de Soria y
Zaragoza, y que forma parte del Sistema Ibérico. Cerca se encuentran
localidades de renombre como Tarazona.
Se
tienen noticias de la existencia de esta fortaleza en fuentes
navarras del año 1185, siendo motivo de disputa entre Navarra y
Aragón, cuando este territorio pertenecía al Reino de Navarra y fue
recuperado por Alfonso II de Aragón. Posteriormente la corona
concedió la posesión del castillo al caballero Sancho Pérez de
Monteagudo. En el año 1413 fue un punto importante en la guerra
civil, y después de varios años de inestabilidad se convirtió en
cabeza de señorío.
La Torre del Homenaje y un recinto que la
rodea, así como los aljibes, son los restos más antiguos del
castillo, y datan del siglo XII. Algunas de las historias de
brujerías y aquelarres que supuestamente se realizaban en este lugar
fueron recogidas en sus escritos por el escritor Gustavo Adolfo
Bécquer, quien dedicó a Trasmoz una historia sobre un cura, Mosén
Gil Limosnero, que libró a los vecinos de la zona de las brujas que
se reunían en las ruinas del castillo. Esta historia de “Las
Brujas de Trasmoz” ha
hecho que el municipio sea más conocido. El poeta sevillano y su
hermano Valeriano, pintor y testigo, estuvieran por aquí,
descansando y creando en el cercano Monasterio de Veruela.
El
castillo fue abandonado en el siglo XVI, debido a la unión entre
Castilla y Aragón y al cese de las disputas fronterizas, y más
concretamente totalmente en el año 1530 cuando la torre del homenaje
se derrumbó debido a un incendio. El castillo es el más importante
de esta zona fronteriza de la comarca del Somontano del Moncayo. Su
planta era un hexágono irregular, con torres en sus vértices que
encuadraban y daban protección a la torre del homenaje, que se
encuentra en el centro.
Se
accedía a él por medio de una puerta-torre, elemento defensivo
característico de muchas de estas fortalezas. Sus muros, de gran
grosor, están rematados en almenas, jalonadas por vanos o saeteras
en la parte central, y otra línea de saeteras en la parte inferior.
La cerca exterior del castillo y los torreones son construcciones de
los siglos XIII, XIV y XV.
La Torre del Homenaje, último
reducto defensivo en caso de ataque, está situada en la parte
central de la fortificación. La torre, en la actualidad esta
totalmente restaurada, tiene planta rectangular y estaba rematada con
poderosas almenas. Hoy día cuenta con cuatro plantas y azotea, y en
ella se ha instalado un museo dedicado al ajuar del último caballero
del castillo, Pedro Manuel Ximenez de Urrea, primer poeta aragonés
publicado, así como otras piezas importantes propiedad de la
fundación.
El
castillo fue construido en piedra, utilizando el sistema de
mampostería, ya que apenas se encuentra labrada. Su posición
geografica convirtió a este castillo en protagonista de las luchas
que tenían los distintos reinos en los que se dividía la península
durante la Edad Media. Esto explica el estado de ruina en que se
encontraba el edificio antes de su restauración en julio de 2002.
Muchas de sus estructuras se habían perdido, como es el caso de las
almenas, la barrera y el foso. Pertenece a la Fundación Castillo de
Trasmoz. El acceso no es libre ya que el recinto está completamente
amurallado y hay que pagar una entrada para su visita. En la entrada
se indica que el precio es para su mantenimiento, conservación y
restauración.
Fuentes: Wikipedia
castillos.net
aragonmedieval.com
miancema (Fotos)
Galería:
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