El Castillo de Penas Róias se encuentra situado en un cerro de las cercanías de la localidad de Mogadouro en el distrito de Bragança de Portugal.
Fue
construido al norte del río Duero en el siglo XII a cargo de la
Orden del Temple, durante el reinado de Afonso I, en los momentos de
la constitución de la nacionalidad portuguesa.
La
donación de Penas Róias a los Templarios en 1145 sugiere que, por
entonces, ya existiría un reducto defensivo de alguna importancia.
Es posible que los torreones de planta circular existentes en los
vértices del castillo pertenezcan a esta fortificación primitiva,
ya no son comunes en arquitectura militar medieval septentrional
portuguesa (que optó en la mayoría de los casos por torres de
planta cuadrangular). Podrían así asignarse a una fase constructiva
anterior, durante la época leonesa, como ocurre los castillos
leoneses de la margen derecha del río Côa, cuestión esta que hoy
sigue en discusión.
A
pesar de su estado ruinoso actual, el Castelo de Penas Róias fue una
de las más destacadas fortalezas medievales de Trás-os-Montes. Para
la defensa oriental de Portugal con el Reino de Castilla y León,
formaba línea con los castillos de Algoso, de la Orden del Hospital,
Outeiro, que pertenecía a la Corona, y con los de Mogadouro (del que
apenas dista 8 km.) y Longroiva, ambos también bajo la orden del
Temple.
Cuando
fue extinta la Orden del Temple la extinción del templo, D. Dinis
transfirió en 1319 los dominios de Penas Róias a la Orden de
Cristo. En esa época se cree que se efectuaron trabajos de
recuperación y fortalecimiento de las defensas, quedando en la forma
que reflejó Duarte d´Armas en su Livro das Fortalezas en el año
1509.
Para
el siglo XVIII el castillo se encontraba ya en ruinas y la cerca de
la villa desaparecida. En 1945 los restos fueron declarados Monumento
Nacional y en el último cuarto del siglo XX se produjeron algunos
trabajos de recuperación y consolidación. Penas Róias constituye
un buen ejemplo de castillo roquero romántico, construido sobre un
espolón rocoso con inmejorables condiciones naturales de defensa. De
planta trapezoidal conserva pequeños tramos de muralla y parte de
dos torres semicirculares a levante.
En
el centro de la plaza de armas se levanta la torre del homenaje, de
planta en rombo con lados de dimensiones variables – entre 7 y 8
metros de ancho -, de muros espesos, en aparato simple de pizarra de
cuarzo con mortero. Internamente se dividía en tres pisos. En los
alzados este y sur, se abren ventanas en cantería. Al oeste se abre
la única puerta, rectangular, a unos tres metros de altura, también
en cantería. Primitivamente se accedía a la torre mediante una
escalera de madera desmontable.
Fuentes: Wikipedia
Castillos, Torres y Fortalezas de Portugal
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