miércoles, 7 de abril de 2021

Castillo de Siurana (Cornudella de Monsant, Tarragona)

 


Las ruinas del Castillo de Siurana se asientan sobre una plataforma rocosa a 730 m. por encima del nivel del mar, al borde de un colosal precipicio de más de 250 m. de desnivel en el extremo este de las montañas de Prades, junto al río Siurana y la población del mismo nombre, en el término municipal de Cornudella de Monsant, comarca del Prirat de la provincia de Tarragona (Cataluña). 

Se trata de una fortaleza es de origen andalusí construida en el siglo IX (probablemente en 869), en época emiral, en un tiempo en que se fortifica la frontera o Marca Superior de Al-Andalus para defender el territorio de los condados cristianos del norte peninsular. 

Hisn Xibrana era una poderosa fortaleza, prácticamente inexpugnable, levantada en un lugar estratégico y de difícil acceso en las montañas de Prades, al borde de un imponente precipicio desde donde dominaba y controlaba un amplio territorio que comprendía parte de las actuales comarcas catalanas del Priorat, Baix Camp, Alt Camp, Conca de Barberà y Les Garrigues, y era centro de una extensa red defensiva constituida por numerosas fortificaciones que defendieron parte de la frontera andalusí con tierras de los condados catalanes hasta el siglo XII. Siurana adquirió especial importancia como principal castillo fronterizo musulmán de la zona a partir del siglo XI. 

Aunque en 1146 el conde de Barcelona Ramón Berenguer IV entregó Hisn Xibrana a Berenguer Arnau, su conquista no se produjo hasta años después. Al parecer los catalanes planificaron la conquista de Siurana antes que las de Tortosa y Lérida, pero antes caerían en manos cristianas estas ciudades musulmanas (Tortosa en 1148 y Lérida en 1149), las fortalezas musulmanas cercanas del Ebro situadas al este y a espaldas de Siurana, y las fortificaciones de las montañas de Prades que dependían de la fortaleza. Siurana resistía. Sin embargo su caída era cuestión de tiempo. Rodeada y aislada por las tropas condales es finalmente conquistada tras un duro, prolongado y sangriento asedio entre los años 1153 y 1154, siendo el último castillo musulmán sometido o conquistado por los catalanes en las tierras que hoy forman parte de Cataluña. Se cuenta que se necesitaron tropas de cuatro condes catalanes para someter la fortaleza. 

Cuenta la Leyenda del Salto de la Reina Mora que Abdelazia, hija del walí de Siurana, al ver el castillo sitiado por los cristianos y a punto de ser tomado por éstos, optó por lanzarse por el precipicio con su caballo antes de caer en manos del enemigo. El caballo, atemorizado, al ver el imponente acantilado, intentó resistirse y parar, pero el impulso fue tan fuerte que ambos acabaron cayendo al abismo. Se dice que junto al precipicio en una roca hoy se puede ver la profunda marca que dejó la herradura del caballo de Abdelazia. 

Una vez en poder cristiano, la fortaleza es gobernada por Bertrán de Castellet, personaje que participó en el asedio, y posteriormente por Albert de Castellvell. A finales del siglo XIII (1294) se construye en su interior una capilla. En 1324 pasa a formar parte de las posesiones del Condado de Prades. En el siglo XVII (1651), al final de la guerra dels Segadors, es derribado por orden del rey Felipe IV, como ocurriría con otros castillos catalanes. Durante la guerra de la Independencia en el XIX (1808-14) la fortaleza fue por atacada e incendiada por los franceses. 

El castillo aparece documentado en 1153. Por su prisión pasaron grandes personajes, entre ellos el que sería rey, Carlos II de Anjou y del Maine. El de Siurana es el típico castillo o hisn musulmán cuya única finalidad era la estrictamente defensiva o militar. Presenta planta alargada e irregular de unos 180 por 50 metros, fue levantado en el borde de un precipicio que da al río, aprovechando defensas naturales, cuenta con una gran torre situada en uno de sus extremos, en la parte más alta, y está rodeado por una muralla reforzada con torres cuadrangulares. El interior se divide en dos recintos, el superior y el inferior. 

Del recinto superior destaca lo que debió ser la gran torre del castillo, en ruinas, levantada sobre roca en la parte más alta, en uno de los extremos, al borde del barranco, su planta es rectangular y actualmente presenta escasa altura. 

Este recinto conserva además restos de una cámara, algunas pequeñas estancias, una cisterna y restos de la muralla que lo cerraba, Junto a la torre y el precipicio se encuentra (señalizado con un cartel), el lugar desde el que supuestamente Abdelazia se lanzó al abismo con su caballo para no caer en manos de los cristianos. 

El recinto inferior es un amplio espacio con medidas de unos 70 metros de largo por unos 15 de ancho. Conserva importantes restos de la muralla, algunas de sus torres en estado de ruina, restos del albacar y de estancias. En el extremo este de este recinto, el opuesto al recinto superior, se observa un foso junto al que posiblemente se ubicaba una de las puertas de entrada a la fortaleza. 

La fortaleza ha sido modificada y trasformada a lo largo de la historia,por lo que se conserva muy poco de su fábrica original. Los restos conservados son de mampostería y sillería. Se encuentra parcialmente recuperado, en estado de ruina consolidada. 

Fuentes: Wikipedia
               castillos.net

Galería:











No hay comentarios:

Publicar un comentario