jueves, 20 de agosto de 2020

Torre de Fornelos (Crecente, Pontevedra)

 


La Torre de Fornelos son los restos del antiguo Castillo de Fornelos, pues es la Torre del Homenaje del mismo, situada en el concejo de Crecente de la provincia de Pontevedra (Galicia). 

En esta parte de la región gallega cercana a Portugal, se levantan los restos del Castillo de Fornelos. Se emplazaba muy cerca del Río Miño, a tan solo 1 km de la frontera con Portugal, actualmente en el concello de Crecente. Se levantó en una loma a 118 m, aprovechando la defensa del natural del pequeño valle del Río Ribadil. 

Hoy observamos en total estado de ruina los restos de la Torre del Homenaje de unos 19 metros de altura. Alrededor, diversos muros de sillería asoman entre la maleza. Según cuentan las guías del concello, sobre estas piedras se levantó anteriormente una edificación romana de la que no hemos encontrado ninguna información. Lo único que nos hace pensar en algo romano es la presencia de una vía romana en el concello de Crecente que se dirigía a Tuy. Se dice que sobre el siglo X se erigió un monasterio, el cual fue destruido para construir esta torre de Fornelos en el siglo XI. La primera referencia escrita data del año 1158. Su situación, en el límite con el país de Portugal, fue escenario de grandes batallas como las, Alfonso VII contra su primo Alfonso Enriquez rey de Portugal. 

Siglos después (siglo XV) fueron los irmandiños los que la destrozaron para que pocos años después la volviera a construir el belicoso Pedro Madruga, quién mantendría aquí grandes batallas contra el Obispo de Tuy, Diego de Muros, aliado de los Reyes Católicos, enemigos estos de Pedro Madruga. En una de las batallas, el obispo sitia la fortaleza con 400 hombres contra una defensa de tan sólo 15. Pedro Madruga y sus hombres se resisten de tal manera con las nuevas armas traídas de Italia, que vencen y vuelven a encarcelar al obispo de nuevo. Más adelante, la torre fue donada por Sancho I de Portugal a Doña Aldonza Vázquez de Fornelos y Fernán Pérez Castro fundadores de la Casa de Fornelos. 

Es una torre de planta cuadrangular, emplazada sobre un outeiro. Presenta distintas alturas, motivadas por su emplazamiento, siendo el alzado W, donde se sitúa la puerta, el alzado de menor altura y los alzados E y N los de mayor altura. Presenta un aparejo de sillería de granito bien escuadrada, dispuesta en hiladas horizontales, a soga y tizón. Presenta dos hojas, con relleno de tierra y cachote de tamaño medio y pequeño. Está asentado a hueso. Todos los sillares conservan huellas de pico y puntero. 

En el alzado E nos encontramos a 34 cm del suelo el primer zócalo, que sobresale del paño del muro unos 7 cm; a unos 60 cm de altura nos encontramos otro zócalo que sobresale también 7 cm. Todos los sillares presentan las esquinas muy romas. No se puede apreciar si presenta vanos en altura, ya que está cubierto de vegetación. 

Este alzado junto con el S, son los más afectados, en el caso del E presenta un importante derrumbe en la esquina SE, que ha afectado al coronamiento de los alzados S y E y, en el alzado E, a la pérdida de la mitad S de los dos tercios de la altura. Este derrumbe se encuentra caído sobre el outeiro, aunque el material que allí se conserva parece menor cantidad que el que correspondería al derrumbe. El alzado S presenta dos zócalos en la zona inferior, el primero situado a 1,97 m. del suelo y el segundo a 2,90 m. del primer retranqueo. 

Sobresalen ambos 6 cm del paño del muro. Los sillares presentan también las esquinas muy romas. Las hiladas son bastante ondulantes, lo cual puede deberse a los problemas estructurales que presenta este alzado. En este caso los sillares se han calzado con ripios. El paramento presenta dos vanos, una saetera alancetada situada a media altura, sobre el segundo zócalo, de aproximadamente 0,80-1 m. de altura por 0,14 m. de ancho que está abocinado hacia el interior con un derrame muy acusado y remate de medio punto dovelado. 

Sobre éste, se sitúa un vano rectangular, enmarcado por un arco de medio punto, cegado, que podría corresponder a un vano de mayores dimensiones y distinta tipología. En la base, presenta los restos de unas posibles ménsulas para soporte de un balcón hoy perdido. Al interior no presenta derrame y está rematado por un arco de medio punto dovelado. El alzado presenta una importante grieta en el lado W con orientación E-W, desde la zona superior N hasta el retranqueo del segundo zócalo, muy próximo a la esquina, que podría estar indicando un problema estructural en la esquina. 

Por debajo del balcón, diagonalmente y hacia el W, presenta una serie de sillares salientes (mechinales) que podrían ser el apoyo de un patín o escalera lateral de subida a un piso alto, al que se accedería a través del vano superior, así las ménsulas situadas en la base, no serían para un balcón, sino para el apoyo del remate de la escalera. 

El alzado W: Se emplaza en la zona más alta del outeiro, siendo el alzado con menor altura, pero el mejor defendido, ya que está orientado hacia la caída del río. En la zona baja, centrada, se sitúa una puerta rematada en un arco de medio punto dovelado. Las jambas se estrechan con respecto al hueco que cubre la puerta en el muro, en la parte baja (segunda hilada de las jambas) presenta dos huecos o retranqueos rectangulares. 

Podría tratarse de los huecos para algún elemento de sujeción, tal vez en relación con alguna estructura levadiza. Se debe indicar que delante de la puerta se conserva una estructura cubierta de tierra, con abundantes restos de pequeños sillares y mampuestos superficiales, en forma de rampa, que posiblemente tengan relación con el acceso a la puerta. 

Al interior, este acceso presenta una bóveda de cañón originada por un arco de medio punto. Este alzado presenta también un zócalo, que sigue la línea del segundo zócalo del alzado S. Conserva un vano en la zona alta, pero la vegetación impide describirlo. 

Sobre la puerta, en diagonal, en sentido N-S se conserva una roza, abierta en el muro que podría corresponder a una cubierta a un agua para algún tipo de estructura hoy perdida. También se conservan algunos sillares sobresaliendo sobre el paño del muro. En el remate del alzado se observan las ménsulas de piedra para apoyo de las vigas de la cubierta. Alzado N: Este alzado se encuentra en la ladera con mayor pendiente del outeiro. 

El aparejo es el mismo que en los otros alzados. Presenta también dos zócalos, que en este caso siguen la línea de los alzados E y W. En la zona baja se observa una pequeña saetera, de las mismas características que la que se observaba en el alzado S, aunque, en este caso, su jamba W está destruida. En la zona alta, en la mitad W se observa la estructura exterior del arranque de lo que podía ser una chimenea. Asimismo, se entrevén las ménsulas para apoyo de las vigas de la cubierta. las vigas de soporte del suelo. 

Segundo piso: A la altura del balcón descrito al exterior en el alzado S, nos encontramos en los alzados S y N interiores, una línea de suelo sobresaliente del lienzo unos 15 cm y que tendría otros 30 ó 35 cm de altura, que creemos corresponde al soporte para otro suelo. Posiblemente se accedería desde el exterior (ver descripción alzado S exterior), pero dado el estado de conservación del interior no podemos asegurarlo. En los alzados N y E tendría, sin embargo, sendas ventanas. 

Tercer piso: En este caso, poco podemos decir. Tan sólo que los alzados donde parece conservarse son el N y W. En ellos parecen verse huecos para mechinales y algún mechinal, donde irían apoyadas la vigas del suelo. Confirman su existencia las ventanas documentadas en los alzados W y N. En el N se observa al interior y en el W al exterior, y parecen corresponderse con las saeteras situadas en lo que hemos denominado semisótano. Tal vez se trata de otro espacio para defensa y en este caso control, ya que supone un importante oteadero del entorno. 

Fuentes: castillos.net
                Wikipedia

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