Castillo de Buñol (La Ginebrosa, Teruel)

 

El Castillo de Buñol se encuentra situado en el término municipal de la localidad de La Ginebrosa de la provincia de Teruel (Aragón). 

Lo podemos encontrar sobre un monte de 529 m de altura, a 6’5 km. en línea recta desde el pueblo, pero a casi el doble por carretera, en el extremo occidental de su término. Las aguas del embalse de Calanda lo bordean por el Norte y Oeste. Muy cercana discurre la carretera A-226, pero al otro lado del embalse y no se puede cruzar. El lugar es sumamente recóndito. Creemos que el mejor itinerario para llegar hasta él es atravesando Las Masadetas, aunque al final la pista forestal está muy deteriorada (septiembre de 2023). El último tramo hay que hacerlo andando. 

Se trata de un antiguo poblado ibérico ocupado después por los romanos. En el año 714 las tropas islámicas llegaron a Boiol que fue ocupado sin resistencia. En 1169 fue ocupado por los cristianos. Su dueño fue Blasco de Alagón por donación de Jaime I. Su hijo Artal le dio carta puebla en 1291 y en 1295 lo permutó con los templarios. Estuvo en manos del Temple hasta 1309 en que se disolvieron, pasando a manos de la orden de San Juan del Hospital. Sin embargo, al ser conquistada Morella y desplazarse la frontera, el lugar se fue despoblando, siendo abandonado definitivamente durante el siglo XIV. Tras la Desamortización del siglo XIX sirvió de cantera para los vecinos de La Ginebrosa, Mas de las Matas y Aguaviva. 

Castillo roquero de planta irregular adaptada al espacio disponible entre las rocas, con dos recintos claramente diferenciados. Todo el conjunto presenta una fábrica similar, con mampostería trabada con mortero de cal. El recinto superior ocupa unos 540 m2, parece que haya sido aplanado artificialmente y cuenta con una posible puerta en su extremo meridional. Se pude seguir todo su perímetro por la línea de sus muros, aunque a nivel de cimientos en su mayor parte. 

El recinto inferior, con funciones de albacar, ocupa una extensión aproximada de 5.000 m2, y se sitúa al Suroeste del recinto superior. Solo conserva sus lienzos Oeste y Sur, y dos quiebros donde estuvieron las puertas de entrada. Nada queda de su interior. 

Se comenta que en su ladera Este se encontraba un poblado árabe, pero esta ladera es prácticamente vertical, por lo que creemos que el poblado debió estar en la vaguada meridional, donde actualmente quedan las ruinas de la ermita. La existencia tanto del castillo como del poblado responde a la necesidad de proteger un caudaloso manantial que surge a sus pies, llamado Los Fontanales. 

Su estado es muy malo. Apenas quedan algunas líneas de basamentos, aunque se puede distinguir gran parte del perímetro de los dos recintos. 

Fuentes: Wikipedia

               castillosricsol.org

               SIPCA

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